Intolerancia, Violencia e Ignorancia:
los tres pilares de grupos retrógrados y sociópatas
La Gran Logia Femenina de Argentina repudia enérgicamente el cobarde ataque perpetrado contra la sede de Laprida 1027 de la Masonería Argentina de la ciudad de Rosario, por el cual sus miembros resultaron amenazados de muerte y donde se exhibe una cruz.
Las expresiones de odio, fanatismo e intolerancia sólo nos recuerdan la fragilidad de los valores que defendemos: el derecho a pensar y expresarse libremente, la fraternidad debida hacia cualquier ser humano que sufre, la tolerancia entre personas con diferentes creencias espirituales e idearios sociales, o la obligación que tenemos todos los seres humanos de buscar el crecimiento y perfeccionamiento individual para ser más útiles a nuestras sociedades.
Como institución de Masonería Femenina expresamos nuestra solidaridad con la Gran Logia de la Argentina de Libres y Aceptados Masones y toda la Masonería en general, lamentando que se produzcan hechos de este tipo, que expresan una forma de intolerancia y desconocimiento que dañan la convivencia social.
Este grave delito contra la libertad de las personas da cuenta de la intolerancia y la violencia que permea la sociedad actual, lógica que se reproduce cuando la mirada de las autoridades y de las Iglesias es prescindente y cuando prefieren ignorar o mirar para otro lado, todo lo cual recuerda las persecuciones sufridas por la Masonería a través de la historia en sociedades apáticas e indiferentes a la violencia sectaria.
Por ello, la Gran Logia Femenina de Argentina solicita a los fiscales que intervengan en la investigación de tales amenazas y amedrentamiento público a personas que ejercen sus derechos constitucionales en fraternidad y absoluto respeto de la ley, el rápido esclarecimiento de los hechos y el castigo de los culpables.
Asimismo y dados los símbolos que allí se exhiben, solicita a las Iglesias que se pronuncien avalando o rechazando la idea de asesinato vinculada con el mensaje de Jesús.
Cuando se trata de imponer el miedo y el terror a sus integrantes, los cimientos de las sociedades vacilan.
María Elena Castillo
Gran Maestra
Gran Logia Femenina de Argentina
Buenos Aires, 20 de Octubre de 2022